HUMBERTO GACIO (en memoria)

El pasado día cinco de enero, víspera en muchas personas, sobre todo los niños, de un día mágico, a mi me daban una mala noticia.. Un cliente se pasaba por mi oficina sólo para decirme que antesdeayer falleció Humberto Gacio.

Seguramente para muchos su nombre es desconocido. Para mi lo era hasta hace un par de años en que lo conocí. Este gran hombre que ya superaba los ochenta años fue uno de los periodistas radiofónicos más reputados de Sevilla, Andalucía y España. Hizo casi toda su carrera radiofónica en La Cadena SER, de la cual, por cierto, no he oido el menor comentario sobre su fallecimiento.

He dicho que era un gran hombre y hasta hoy, ya no sólo por mi conocimiento de él, sino por el conocimiento que han tenido de él otras personas, de las cuales siempre han salido palabras respeto y admiración hacia este hombre.

Estaba dotado de una voz potente, sin acento, llena de bondad. Era un hombre de una gran cultura y excelente conversación, con el cual no me importaba perder parte del tiempo de mi trabajo conversando de cualquier tema que fuera, de actualidad o no, pues siempre me asombraba ver sus conocimientos al respecto y que para su edad no estaba nada encasillado en el pasado que había vivido.

Es curioso que la última vez que lo vi y hablé con él fue el día antes de su fallecimiento en que pasó por mi oficina. Lo vi mal, sinceramente, pero con el estado de ánimo que tenía siempre, fuerte. Sus preocupaciones eran su mujer, que lleva más de un año bastante fastidiada y sus hijas, las cuales llevan también ya mucho tiempo en el paro. De su salud sólo se quejaba de la artrosis que tenía que le producía fuertes dolores y casi no le permitía noverse. También fue curioso que un antiguo compañero suyo me había preguntado por él por la mañana, a primera hora, cuando aun no conocía el fatal desenlace de su vida.

Antesdeayer, en la tarde noche, un infarto se lo llevó para siempre. Un hilo de tristeza me embargó desde el medio día de ayer, cuando me comunicaron la noticia. Sé que es ley de vida y que a todos nos llegará nuestro momento sin remisión. Pero cuando se va alguien bueno se siente, se lamenta mucho más.

Descanse en paz este gran hombre, comunicador extraordinario y, sobre todo, hombre bueno.

Comentarios

Entradas populares de este blog

RELATO DE UN HOMBRE SOLITARIO

PINCELADAS DE JUVENTUD - 2º PREMIO CONCURSO PARQUE ALCOSA

CATALAN ¿DIALECTO DEL CASTELLANO?